Este es un blog donde se habla de todo y nada, los autores son gente desquiciada y buena para nada que viven en una cloaca que se desplaza desde Toluca hasta Veracruz pasando por el DF,Cuernavaca y Guerrero. cabe mencionar que estos entes solo se dedican a hacer cosas que nunca serviran en una vida laboral normal.
jueves, 8 de mayo de 2008
Los malos Rulez
Que porque siempre le voy a los malos en las películas?? me preguntaron en alguna ocasión viendo algún film de esos que holywood pone para engordar ya a la obesa de por si mal alimentada y grasienta mentalidad de la gente en las salas de cine , en ese momento no respondí pues calle a la cuestionadora con un hipermegabesote de toda la película dejando al olvido tal pregunta necia a mis oídos en esa ocasión , hasta que hoy bañándome casi después de 15 años recordé a esa chica y con ello su interrogante, así que hoy la voy a responder: le voy a los malos porque son los mas chidos de las películas , tienen una inteligencia vivaz ,rayando en lo extraordinario y una determinación de hierro para alcanzar sus objetivos impuestos en una sociedad ya por default dominada por ellos a base de sacrificio y liderazgo nato, son personas sumamente trabajadoras que no se pueden dar el lujo de andar haraganeando por ahí para que otro les quite el puesto y eso si es admirable como no, asustan a la gente debil de mente que sin mas empacho se les ocurre llamarlos "los malos de la pelicula" además pasando a cosas mas frivolas también tienen mejores trajes, mejores armas, mejores vehículos e incluso mejores viejas.
-Que los malos?? -A guevo.
Myrna donde andaraaaaas snif.
miércoles, 7 de mayo de 2008
Después
Creo que después de un tiempo no dejas de luchar si no simplemente aceptas las cosas como son, y así caminaría por las calles donde estuvimos, o los lugares que visitamos, seguramente caminaría detrás de aquella persona desconocida que alguna vez seguimos, o andaría en círculos por esas cuadras interminables ¿no sé?, buscaría entre la gente, a la gente que nunca he visto, rondaría de cerca ese lugar donde el carro se quedaba, todo para ver si de casualidad y en un extraño golpe de suerte te veo….
Hoy por un día, manejaré al fin del mundo y me sentaré a la orilla del universo, si en ese tiempo el cielo no hablara y la noche callara, si tan sólo por un segundo el tiempo se detuviera y mi alma estuviera tranquila si tan sólo por hoy o por un día mi sol no sé pagara… No sé las cosas podrían ser muy diferentes.
Y ese amargo sabor de boca, regresó otra vez y no fue el hecho de no morder o dejar de morder la hierba es más bien el vacío y ese pedazo mío que murió ya tantas veces, quizá lo intente revivir una vez pero me di cuenta que no respondía, no sé son esas ocasiones que quisieras correr sin dirección con los ojos cerrados, y si logras abrirlos te ves a ti mismo corriendo detrás de ti. Tengo miedo de que este deseo en realidad sea una acción recurrente y obviamente circular, algún erudito escribió que las decisiones tomadas al final sólo sean el principio de la otra solución.
Me siento como ese condenado a muerte, que se cree hijo de dios y no puede ni evitar el suplicio de su propia muerte. O tal vez sea uno de esos malditos condenados por la marca de Caín.
Después de todo sólo me queda caminar como ciego sin Lazarillo. Tal vez algún lugar encontraré.
Después mucho después de tanto vagar de caminar sin sentido alguno, o de perderme en la luz sólo después encuentre la calma.
Hoy por un día, manejaré al fin del mundo y me sentaré a la orilla del universo, si en ese tiempo el cielo no hablara y la noche callara, si tan sólo por un segundo el tiempo se detuviera y mi alma estuviera tranquila si tan sólo por hoy o por un día mi sol no sé pagara… No sé las cosas podrían ser muy diferentes.
Y ese amargo sabor de boca, regresó otra vez y no fue el hecho de no morder o dejar de morder la hierba es más bien el vacío y ese pedazo mío que murió ya tantas veces, quizá lo intente revivir una vez pero me di cuenta que no respondía, no sé son esas ocasiones que quisieras correr sin dirección con los ojos cerrados, y si logras abrirlos te ves a ti mismo corriendo detrás de ti. Tengo miedo de que este deseo en realidad sea una acción recurrente y obviamente circular, algún erudito escribió que las decisiones tomadas al final sólo sean el principio de la otra solución.
Me siento como ese condenado a muerte, que se cree hijo de dios y no puede ni evitar el suplicio de su propia muerte. O tal vez sea uno de esos malditos condenados por la marca de Caín.
Después de todo sólo me queda caminar como ciego sin Lazarillo. Tal vez algún lugar encontraré.
Después mucho después de tanto vagar de caminar sin sentido alguno, o de perderme en la luz sólo después encuentre la calma.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)