martes, 16 de febrero de 2010

la ultima mision

Con sudor y sangre erradicamos la plaga en una lucha secreta...

Cuando lo logramos el portal temporal ya no se abrió mas, entonces fue que los sobrevivientes nos reunimos, recogimos las armas y juramos por ningún motivo no revelar nada a nadie bajo ninguna circunstancia, eso fue apenas hace 12 años.

Recuerdo vívidamente cuando llegamos aquí desde algún momento en el futuro a terminar la misión que permitiría salvar a gran parte de la humanidad, éramos apenas unos adolecentes enviados a una guerra rumbo a lo desconocido, siempre permanecíamos escondidos y luchando contra el enemigo, esos desgraciados rojos que nunca debimos haber creado .,y... lo logramos, en verdad que lo logramos.

la cosa estuvo en que la única manera de terminar esto fue vencerlos en una táctica global y sorpresiva basada envíos masivos de soldados por los portales de tiempo a lugares estratégicos, barrimos con todos ellos en menos de 6 horas con bajas excesivas de nuestro lado pero así lo ameritaba una ultima misión.

Al terminar, el estado de ánimo fue muy extraño porque al quedarnos varados en este tiempo asi tan derepente, sin objetivo en la vida, nos llego un vacio existencial debido a que no somos personas normales, solo soldados entrenados para lograr nuestros objetivos sin importar nada ni nadie.

Y precisamente en ese vacio, fue cuando conseguimos las identidades y nos dispersamos a lidiar con una experiencia nueva, tener una vida. Algunos de nosotros se dedicaron a los abusos, otros a viajar, otros a estudiar y solo la minoría busco llevar algo mas tranquilo.

Yo personalmente encontré un empleo mejor que el de "buscar y destruir”.

Fue cuando la conocí, en una tarde soleada, con el viento frio de julio, en el café que se encuentra camino a mi casa.A menudo nos encontrábamos y platicábamos y reíamos de cosas que ya he olvidado.

Un día así como así estreche sus manos por primera vez y no pudimos separarnos un segundo mas, juntos hicimos planes y a los seis meses de conocernos nos casamos sin pensarlo dos veces. De ella me gustaba esa cabellera roja, que con el solo hecho de contemplarla me hacia olvidar los horrores de la guerra, y su sonrisa me quito el miedo que se siente al esperar constantemente que se abriera el portal para ir a otra misión, la que fuera.

Hoy amanecí muy nervioso, tuve pesadillas otra vez, me siento especialmente oxidado y ahora voy recorriendo el pasillo que me saca de la habitación del departamento, de pronto se abre el portal en la cocina y ella esta en la sala mirándome fijamente con esa sonrisa que me dice todo sin palabras, no lo ve, pero el deber me llama y solo le digo adiós con la mano y una mueca nerviosa, no comprende pero sonríe, entro a la cocina, cruzo por el portal y de nuevo el vértigo, la nausea y la desorientación pero ahora es diferente porque no puedo contener el llanto al saber que no la veré de nuevo.

1 comentario:

fania dijo...

mira si se nota que llego el 14 de febrero y que falta menos para que seas el sr de...si no cabe duda toooodos tenemos aunque sea poquita sangre en las venas.que bien que subiste ya hacia falta ejercitaras los dedos.